Febrero 6 de 2019
Recuerdo mis primeros viajes al poco tiempo de ser diagnosticada con diabetes tipo 1, no estaba segura de cómo llevar en ese momento la insulina por temor a que se dañara. Llevaba maletas pesadas por la gran cantidad de geles que mantuvieran la temperatura. Con la experiencia me fui acomodando y consiguiendo las maletas y neveras indicadas para mis viajes. Aunque sigo llevando una maleta extra, viajo más cómoda y segura.
Es diferente si viajamos en carro o avión, por el tema de los controles de seguridad, en cualquier caso debemos asegurarnos de llevar el doble de los necesario y saber actuar ante cualquier eventualidad.
Aquí muestro cómo llevo mis medicamentos e insumos: